Canarias mantendrá las ayudas a la importación de cereales para alimentación animal

El consejero de Agricultura, Ganadería, Pesca y Aguas del Gobierno de Canarias, Narvay Quintero, afirmó en comisión parlamentaria que mantendrá las ayudas del

Régimen Específico de Abastecimiento (REA) a la importación de cereales para alimentación animal.

En respuesta a una pregunta formulada por Román Rodríguez, de Nueva Canarias, el titular del Área dijo que el Departamento considera fundamental el mantenimiento del nivel de ayuda actual, ya que cubre los gastos de transporte y almacenamiento y permite que los ganaderos canarios se suministren en las mismas condiciones que sus competidores continentales, en especial los ganaderos de las islas no capitalinas.

Esta línea incide de forma significativa en el resultado económico de una explotación de ganado, ya que los costes por la alimentación de los animales pueden llegar a suponer el 70% de los gastos de la instalación.

Durante la sesión, el consejero explicó que en la pasada Legislatura, se incrementó la ayuda de la importación de cereales en dos ocasiones. En la primera de ellas, pasó de 65 euros por tonelada a 82, y posteriormente de 82 a 100. Esa subida fue fruto de numerosos encuentros con el sector agrario y entró en vigor en enero de 2014.

“Las ayudas se ajustarán siempre que no perjudiquen ni obstaculicen el desarrollo de la producción agraria local; no renunciamos a trabajar por incrementar el autoabastecimiento también en este punto”, indicó Quintero.

Por ello, el miembro del Ejecutivo señaló que continuará con el plan forrajero de Canarias que se puso en marcha para abaratar los costes a los que se enfrentan los ganaderos. Este plan, iniciado en la anterior Legislatura en colaboración con otras administraciones, científicos y organizaciones del sector primario, es considerado fundamental para propiciar dicho ajuste de costes de los productores ganaderos.

Fomentar esta plan supone poder tener precios más estables, dadas las grandes fluctuaciones a los que se ven sometidos los insumos de importación, y, por lo tanto, mejoras en la rentabilidad de las explotaciones. Junto a esto, además, se potencia una subindustria agraria de cultivos de forrajes que ofrece posibilidades de generación de empleo. La recuperación del paisaje, la conservación de la biodiversidad y la protección del medio ambiente son otros de los beneficios de continuar con esta acción.

“Creo que mientras esa producción propia se incrementa, debemos mantener las ayudas; eso no significa que dejemos de trabajar por que la cabaña ganadera local se beneficie de mejores y más estables precios”, concluyó el titular de la Consejería.