Los ganaderos de extensivo (vacuno, ovino, caprino y equino) están padeciendo una doble crisis este año. A la bajada de los precios de la carne se unen los
problemas climatológicos debido a la falta de precipitaciones y las altas temperaturas de este verano, que les han obligado a suplementar la alimentación de sus animales mediante forraje, pienso y otros complementos, lo que, sin duda, va a dañar su cuenta de resultados, según publica La Rioja.
Por ello, la organización agraria ARAG-ASAJA ha solicitado a la administración autonómica retomar las ayudas de mínimas contempladas por la Comisión Europea dentro del marco de la PAC, que constituyen un importante instrumento para hacer frente a situaciones críticas como la actual. Dada la situación en la que se encuentran los ganaderos, la organización agraria espera que la Consejería de Agricultura estime su petición y ponga en marcha este tipo de ayudas que, desde 2008, no se han vuelto a activar. Además, solicita la inclusión de una partida de, al menos, un millón de euros para su puesta en marcha, ahora que se están elaborando los presupuestos del próximo año.
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