El estado venezolano de Nueva Esparta siempre se ha caracterizado por sus hermosas playas y lugares históricos, pero indudablemente la isla es mucho más que turismo. Su particular clima cálido y muy seco favorece la vegetación de ambientes áridos, ideales para la cría y producción de ganado caprino, que podría convertirse en un potencial económico para la entidad, aunado a la generación de empleos, según publica En Oriente.
Así, la producción caprina representa una alternativa en el mercado, siendo la carne y el queso uno de los principales productos comerciales. A diferencia de otros estados del país, en Nueva Esparta la cultura en cuanto a la cría de este bondadoso animal es prácticamente nula, ya que son pocas las personas que se dedican a este oficio.
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