Los quesos de Teruel buscan expansión internacional con exportaciones a China y Japón

La gastronomía turolense está representada por el queso curado de oveja y cabra en FITUR. El molde con forma de corazón está patentado, desde 2013, por la Asociación Turolense de Productores de Leche y Queso.Los ocho lóbulos del molde lo hacen exclusivo y único en España y ningún otro queso puede comercializarse con esta forma, según publica El Economista.

El queso que se elabora con leche de oveja y cabra cruda procede de las explotaciones que poseen los propios productores o de otras cercanas, pero siempre a partir de materia prima controlada, como ha querido dejar claro el presidente de la mencionada asociación, Vicente San Francisco.

Las empresas que comercializarán este manjar son El Hontanar, de Aguilar del Alfambra; Tronchón, de igual nombre que la localidad; Sardón, de Samper de Calanda; Quesos Sierra de Albarracín, de la citada localidad; el Rodeno, de Rodenas, y La Val, de Mezquita de Jarque.

El queso de oveja necesita entre dos y cuatro meses, mientras que el curado de oveja requiere de un periodo de maduración a partir de los cuatro meses. El queso semicurado de cabra tiene una maduración mínima de dos meses y se puede encontrar con el nombre de Sardón, Tronchón y Hontanar.

La producción anual de todas estas marcas comerciales ronda los 300.000 kilos y se distribuyen en un “mercado muy estable” que comprende la Comunidad autónoma de Aragón y otras ciudades como Madrid, Barcelona y Valencia.

También han emprendido la exportación a otros países y han comenzado en el mercado asiático y “aunque la apertura en el extranjero es difícil”, países como Japón y China ya degustan estos quesos, ha señalado San Francisco.

Su participación en eventos nacionales les ha llevado a asistir al Salón de Gourmets, que se celebra en Madrid en primavera. Algunos de los quesos de esta asociación, como Hontanar y el de Sierra de Albarracín, han obtenido premios en la cata-concurso de la Feria de Otoño de Biescas.