La provincia de Castellón se caracteriza por ser productora y consumidora de queso fresco. Estos quesos se denominan también blandos, retienen gran parte del suero y no se someten a maduración o afinado. Su vida es corta: no más de diez días. Tradicionalmente se elaboraba con leche de oveja o cabra cruda. Hoy también se utiliza de vaca y con leche pasteurizada, según publica El Periódico Mediterráneo.
Dentro de las variedades de queso fresco de la provincia de Castellón, el queso de servilleta hace referencia al molde con cual se prepara y que le confiere su forma tan característica. Se hace con leche de oveja y de cabra. Se puede degustar tanto fresco como curado y en ambos casos sorprende por su sabor suave y agradable.
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