Los beneficios de la gestión contados por los ganaderos

SEMINARIO ‘G10: Mejorando la calidad de vida en el sector’

Miguel Ángel Gómez. Ganadero.

MI EXPLOTACIÓN

Mi explotación es una explotación familiar de ovino de carne y cereal de secano, principalmente trigo y cebada. Estamos en un pueblo de Teruel que se llama Cervera del Rincón, con una altitud de 1.250 metros, lo que influye en los pastos, sobre todo en el invierno. En la explotación, hay 1.280 hembras y 45 machos de raza Rasa Aragonesa, inscritos en el libro genealógico de la asociación Angra. El sistema de reproducción que se tiene es de tres épocas de partos al año.

Se trata de un sistema de producción semi-extensivo, ya que las ovejas que no crían salen a comer al campo. Como tenemos agricultura, en ocasiones pastan en los barbechos y las rastrojeras. También se aprovechan los pastos de una pequeña loma que tenemos al lado de la explotación. Con estos pastos se puede llegar hasta prácticamente mitad de diciembre, por lo que comen lo suficiente en el campo para no tener que ayudar a los animales con ningún aporte en la nave. Una vez que llega el invierno, con esa altura que tenemos y los días más cortos, son habituales el frío, la nieve y la lluvia. Así, se les da un pienso a las ovejas. Aunque tenemos cereal, vendemos ese cereal para comprar un pienso equilibrado para las ovejas, ya que así nos da mejores resultados que con el cereal entero. Cuando llega el invierno, se les da de comer en la explotación y se les aporta el pienso y la paja.

Las ovejas que van a criar sí están estabuladas todo el año. Una vez que se van a separar, se limpia y se desinfecta la nave, se ponen en la nave a lotes y, según van pariendo, se van sacando a las jaulas de forma individual, en las que las ovejas están con su cría durante 35 o 40 días hasta que se desteta la cría. Para prevenir posibles mamitis, se tiene a las ovejas durante tres o cuatro días con los corderos, pero sin pienso, únicamente con paja y agua, para que no den leche y evitar posibles mamitis. Transcurridos esos cuatro días, se les quitan los corderos y las ovejas están dos días más únicamente con paja y agua. Después se les empieza a dar algo de pienso a las ovejas para que se recuperen de esos cinco o seis días.

Los corderos se quedan en el cebadero hasta el momento de la venta, que suele ser con 21 kilogramos.

Los índices productivos de la explotación son 1,34 partos por oveja, 1,46 corderos por parto, un 4,76% de mortalidad perinatal (abortos y corderos muertos), un 5,03% de mortalidad de la cría (nacidos vivos y muertos hasta los 21 kilos), 1,54 corderos vendidos por oveja (para matadero o para vida) más un 20% de reposición para ovejas de desvieje o que mueren.

LA GESTIÓN

Para mí, la gestión es totalmente rentable. Con todos los datos que se recogen, se pueden analizar los problemas y tomar las decisiones para corregir o mejorar los datos, en el caso de que esté en nuestra mano.

Se trabaja con lector en la explotación. Cuando ha parido el animal y llegan a las jaulas de parto, se hace la primera selección de si la cría va a ir para vida o matadero. Se hace poniendo el crotal al cordero en la oreja derecha o en la izquierda. Si se pone el crotal derecho, ese cordero se puede dejar para vida, aunque luego habrá que observar el desarrollo hasta los 21 kilos que se alcancen hasta los 50 o 55 días de vida. Si se pone en el izquierdo, irá para el matadero por algún defecto de la madre: fallo de ubre, el tamaño no es adecuado... Es importante que la oveja para, pero también debe tener una buena capacidad lechera para criar al cordero. En las madres se mira la ubre y, si tiene algún defecto, se marca la oveja en el lector para posteriormente eliminarla. En el caso de las ovejas buenas, con mucha leche y un índice genético alto, son marcadas para entrar posteriormente en un lote de inseminación o de monta dirigida. Además, las crías son seleccionadas para vida.

Trabajamos bastante en la selección de la resistencia del scrapie. De hecho, todos los machos son R1. Para conseguirlo, cuando nace un cordero se marca con un crotal de distinto collar para hacerles unos análisis. Si sale R1 se puede dejar para vida o venta a otras explotaciones. Solemos tener bastantes machos, pero en el caso del scrapie se deja más por si algún ganadero tiene problemas de scrapie y demanda ese tipo de machos.

La gestión consiste en recogida de todos los datos posibles de partos (abortos, simples y múltiples), corderos (nacidos, muertos, causas de la baja, vendidos), ovejas (sin leche, problemas de parto) y facturas (alimentación, gastos, ventas). Trabajo con lector porque considero que es la forma más eficiente para volcar los datos y no tener errores. Desde Coteve, que son los que me analizan los datos, también lo prefieren.

De esta forma, a través del lector se pueden tomar muchas decisiones. Se pueden eliminar animales improductivos, que son los que no han parido ninguna vez a lo largo del año. Cuando llevan dos partos que se han saltado, se les pasa por la manga para hacer una ecografía. Si ese animal sigue estando vacío, no se le da más oportunidades y se desvieja. Seleccionamos corderas para reposición con hijas e hijos de las mejores ovejas, atendiendo a aspectos como índice genético, aptitud maternal, capacidad lechera o si es parto simple o doble. En los machos, además de lo anterior, se selecciona que sean R1 para el scrapie. Como he comentado antes, se seleccionan a los mejores animales para inseminación, que se sincroniza a través de esponjas, o monta dirigida con el lote de ovejas y un único macho durante unos 20 días.

Los planes sanitarios se hacen a través de Coteve. También trabajamos con MSD Animal Health con una vacuna viva de clamidias que se aplica a la reposición a los tres meses de vida.

También se optimiza la alimentación, con un buen pienso que permita una buena producción de leche de la oveja para que saque adelante al cordero.

Una oveja que no sea improductiva, pero de la que no se vendan los corderos, da mucho trabajo y es un grave problema en una explotación. Eliminando las ovejas que no son rentables en la explotación, se mueren muchos menos corderos y se puede vender un número mayor.

LOS BENEFICIOS DE LA GESTIÓN

Considero que realmente no hay inconvenientes en realizar gestión técnico-económica. Está claro que lleva tiempo, sobre todo en tomar datos, pero se recupera en el tiempo que se ahorra en amamantar corderos, en cuidar a ovejas que paren pero no sacan adelante al cordero... Cuantos más datos se toman, mejor se puede estudiar el problema y buscar una solución.

Por lo tanto, la gestión me aporta una serie de beneficios. Se trata de una dinámica de trabajo a la que hay que acostumbrarse con la toma de datos, aunque hay que tener en cuenta que la ganadería no son matemáticas y en ocasiones hay altibajos, porque se depende mucho de la meteorología. Sin embargo, desde que tomamos datos se ha subido un 0,36% anual en el número de corderos vendidos por oveja, al eliminar las ovejas improductivas y dejar las corderas con una buena genética.

Uno de los beneficios ha sido mejorar en la capacidad lechera de las ovejas. En el año 2012, un 14% de los corderos que se morían era por falta de leche, pero en 2016 se ha bajado al 6%.

La gestión me ha ayudado a mejorar en prolificidad. Marcando con el lector a las ovejas que criaron bien a los corderos durante el parto y en la etapa posterior, se hace un lote para realizar una monta dirigida con un macho y así esos animales se quedan para vida. También trabajamos con el Gen Santa Eulalia, de la asociación Angra, que mejora la prolificidad. Desde que se introdujo en el rebaño, las ovejas que tienen el gen casi dan medio cordero más por año que las ovejas que no tienen ese gen prolífico. Las ovejas están en el mismo rebaño, con el mismo manejo y con la misma alimentación, pero son más prolíficas por el gen. Eso sí, aunque sean prolíficas, lo importante es que saquen los corderos adelante. Si no es así, son eliminadas.

La gestión también me ha ayudado a mejorar en genética. Al estar en Angra, se trabaja la morfología y, como comentaba antes, incidimos en la selección por resistencia del scrapie.

También hacemos gestión económica de la explotación. La mayor cantidad de ingresos que tenemos es la venta de corderos con el 68%, con pequeños porcentajes del 3% de venta para vida y del 3% desvieje, además de un 1% de la venta de lana y un 25% de las subvenciones. Hay que tener en cuenta que el precio del cordero se ha mantenido prácticamente invariable desde hace tres décadas. Sin embargo, el coste de la vida se ha incrementado. Si el cordero hubiera subido lo mismo que el IPC, el porcentaje de ingresos de la venta de corderos por mi trabajo sería mucho mayor, porque quiero que la empresa funcione bien de forma independiente, sin las subvenciones. En el tema de los gastos, las ovejas que crían están estabuladas y al ganado vacío también hay que darle pienso en invierno, por lo que el porcentaje más grande de gasto es en alimentación, alrededor del 76%, tanto en pienso como en posibles pastos que se puedan comprar alrededor, mientras que la paja viene de la zona que tenemos de cereal. Al ser una zona de secano, nos adaptamos a lo que nos encontramos, por lo que sólo trabajamos con cereal y con paja, no con subproductos. La otra parte de gastos son zoosanitarios y de otro tipo, como pueden ser gastos en seguridad social, teléfono, electricidad...

La gestión ha mejorado mi calidad de vida. Ha mejorado la productividad de los corderos, por lo que los ingresos son algo más altos. Por lo tanto, esos ingresos se reinvierten en la explotación para aumentar el censo y mejorar las instalaciones. Así, la automatización de la alimentación permite que el esfuerzo y el tiempo se reducen, lo que permite que se aplique más atención en las parideras y se mejore la calidad de vida. A los ganaderos reticentes, yo les recomendaría que tomaran datos y las decisiones sean en base a esos datos.