Los mataderos españoles sacrificaron durante los primeros siete meses del presente año un total de 713.561 ejemplares de la especie caprina, lo que significa un incremento del 6,2% respecto a los 671.786 animales que se sacrificaron en el mismo periodo del año anterior. Así lo muestran los datos de la última Encuesta de Sacrificio de Ganado, elaborada por la Subdirección General de Estadística del Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente (Mapama).
La mayor razón de este incremento se encuentra en la evolución de los sacrificios en Andalucía, ya que se ha pasado de los 229.545 animales que pasaron por los mataderos en los primeros siete meses de 2016 a los 257.782 del presente año. Por lo tanto, se trata de un notable aumento del 12,3%. En el global nacional, este incremento en Andalucía de unos 28.000 sacrificios representa dos tercias partes del total de España.
Además, teniendo en cuenta que el peso de la carne producida ha incrementado en esta comunidad autónoma en una proporción mayor que la de animales, en concreto en un 16,1%, se deduce que el sector andaluz de caprino ha vivido un cierto proceso de desvieje de su censo de animales en producción, al menos en comparación con los datos del pasado ejercicio.
Además, en el total nacional, la carne de caprino producida en 2017 es de 5.812 toneladas, por lo que se ha incrementado en un 11,4% respecto a las 5.217 toneladas de 2016, con aumentos muy fuertes de la citada Andalucía, pero también de Murcia (+21,7%), Castilla-La Mancha (+30,3%) y Castilla y León (+53,8%).
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