El Senado aprueba una moción del Partido Popular para fomentar los sectores ovino y caprino

El Pleno del Senado ha aprobado una moción presentada por el Grupo Popular que insta al Gobierno a adoptar medidas en materia de fomento del sector ovino y caprino, sin que éstas generen coste económico alguno. Su aprobación se ha realizado con los votos en contra de los grupos Socialista, Convergencia i Unió, Entesa pel Progrés de Catalunya e Izquierda Unida y Foro Ciudadano Foro Asturias -estas dos últimas del Grupo Mixto- al ser rechazadas las cinco enmiendas de adición que cada una de ellas presentó para sumarlas a la moción.

Carlos Manuel Cotillas, senador del Grupo Popular, ha defendido la necesidad de apoyar al sector del ovino y caprino para evitar su desaparición ante el descenso del consumo de carne de estas especies, el aumento de sus costes de producción, la reducción de los márgenes y la falta de rentabilidad de las explotaciones.

La moción aprobada insta al Gobierno a “continuar transmitiendo mediante campañas de promoción aspectos medioambientales, de tradición o de desarrollo rural vinculados al sector del ovino y caprino”, a “favorecer la concentración de la oferta y a reforzar el papel de los productores” para mantener el “tejido rural”. También apuesta por “impulsar la internacionalización de los productos del ovino y caprino, así como el fomento de la innovación” para aumentar la competitividad de este sector.

Según Cotillas, “hay que buscar soluciones” para que esta actividad vuelva a ser “atractiva para las nuevas generaciones” que se quieran dedicar a ella, y para que vuelva a aumentar el consumo de este tipo de carne, que en 2012 bajó hasta los 1,9 kilos por persona y año.

En opinión del senador socialista Antonio Ernesto Arrufat, el Gobierno “no está pensando en el sector” cuando han desaparecido del último Presupuesto del Estado las ayudas a razas autóctonas y se han reducido a la mitad otras para libros genealógicos, medidas agroambientales o para la incorporación de jóvenes al campo. Entre los puntos que el Grupo Socialista quería añadir a la moción popular se encontraba la creación de un fondo a partir del capítulo primero de la Política Agrícola Común (PAC), para que los ganaderos de ovino tengan una ayuda acoplada equivalente a entre 30 y 35 euros por cabeza mientras se mantenga la actividad.
Desde el Grupo Convergència i Unió, Manel Plana ha hecho hincapié en la apuesta por el puerto de Tarragona para potenciar la exportación de ovino y caprino a países del arco mediterráneo y el aumento de las ayudas estatales para el fomento y promoción del sector para incentivar el consumo de este tipo de carne. Plana ha advertido que si el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente quiere que el sector agroalimentario siga siendo una de las “locomotoras de la economía española, son necesarias unas dotaciones económicas mínimas” que mantengan en positivo la balanza comercial.

Por Entesa pel Progrés de Catalunya, el senador Francisco Boya ha calificado de “literatura” la moción presentada por el GP, de la que ha echado en falta que sea más “pragmática” y tenga una puntual mención a las ayudas a los rebaños que conviven con especies protegidas como el oso y el lobo.

En el Grupo Parlamentario Mixto, el senador de Foro de Ciudadanos-Foro Asturias (FAC) Isidro Martínez Oblanca también ha incluido en su enmienda de adición la necesidad de elaborar un programa específico en las áreas donde conviven con el lobo.

El portavoz de Izquierda Unida, Jesús Enrique Iglesias, quería que se ampliara la moción con una puntual mención al fomento de las producciones ecológicas y los sellos de calidad en ovino y caprino.