Galicia, Cantabria, País Vasco y La Rioja: los últimos reductos para la caza del lobo

Galicia, Cantabria, País Vasco y La Rioja son las únicas comunidades en las que se puede cazar el lobo después de que la Junta de Castilla y León haya confirmado que este animal no se podrá cazar al norte del Duero, donde la especie es cinegética, mientras que al sur es protegida.
Así se recoge en la notificación que la Consejería de Fomento y Medio Ambiente de la Junta ha enviado a la Asociación para la Conservación y Estudio del Lobo Ibérico (ASCEL) que confirma que el lobo no se podrá cazar en Castilla y León.
La notificación, facilitada a los medios por ASCEL y fechada el 10 de septiembre, atiende el recurso de alzada interpuesto por la asociación contra la resolución de la Consejería que aprobaba los aprovechamientos del lobo, esto es su caza, en los terrenos al norte del Duero en las tres temporadas que van del 2016 al 2019.
Con esta decisión en estos momentos el lobo es una especie cinegética y se puede cazar en Galicia, Cantabria, País Vasco y La Rioja, ha precisado a Efe el presidente de ASCEL, Juan Angel de la Torre.
En el caso de la resolución de la Junta, tiene en cuenta las decisiones judiciales dictadas al respecto por el Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad, el TSJCyL, en distintos recursos contencioso administrativos sobre el mismo tema, entre ellos el del pasado mayo que también paralizó la caza del lobo al norte del Duero, como medida cautelar solicitada por la misma asociación, ASCEL.
Como las resoluciones a las que se dirigen el recurso de ASCEL están impugnadas y no están vigentes, la Consejería estima el mismo anulando la resolución que articulaba la caza al sur del Duero.
También hoy, y a través de un comunicado, la Federación de Caza de Castilla y León ha trasladado su temor a que "el lobo podría no cazarse en esta temporada" en la Comunidad, lo que achaca a "los continuos recursos de los radicales animalistas, las decisiones de la Justicia sin medir sus consecuencias y la falta de firmeza de la Junta".
A su juicio, ello deja "al albur de las circunstancias a los colectivos ganadero y cinegético", que para la Federación de Caza son los que "realmente están en el problema del lobo".