Las ovejas de Castilla y León producen una media de 309 litros anuales por los 191 litros de Castilla-La Mancha

Las ovejas lecheras de Castilla y León destacan por una alta capacidad productiva, en comparación con el resto de zonas con una tradición en el sector del ovino lechero. Es una de las conclusiones que puede extraerse con el cruce de los datos de producción anuales publicado por el Fondo Español de Garantía Agraria (FEGA) y las estadísticas de las Encuestas Ganaderas del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA).

Así, Castilla y León tiene una media de producción de 309 litros anuales por cada leche adulta de aptitud láctea, lo que supone una cantidad significativamente más elevada que el caso de Castilla-La Mancha, que apenas llega a los 191 litros producidos por oveja. La importancia todavía significativa en esta última región de los rebaños de raza Manchega, debido al precio de venta más alto que se alcanza gracias a la fortaleza de la Denominación de Origen Queso Manchego, provoca que se den estos datos tan dispares.

También son muy diferentes las conclusiones de las otras tres comunidades autónomas españolas que superan la decena de millones de litros de leche de oveja producidos anualmente. Con unos datos muy altos se encuentra la Comunidad de Madrid, ya que sus ovejas lecheras producen una media de 305 litros, debido a su algo grado de intensificación en las granjas y al cambio racial producido en las últimas décadas. En el lado negativo está Extremadura, con unos datos realmente llamativos que apenas llegan a los 80 litros por hembra y año, mientras que Navarra también tiene unos datos bajo con 134 litros, en este caso debido a la coexistencia de un sistema intensivo con razas foráneas con otro más tradicional de razas autóctonas y una alta estacionalidad de la producción que lleva incluso a no producir leche durante varios meses al año.