Las heladas registradas en los últimos días están condicionando el desarrollo e, incluso, perjudicando a los cultivos cerealistas y leguminosos de Navarra y el sector ovino. Desde el punto de vista meteorológico, este periodo se ha caracterizado por el registro de intensas heladas, alcanzando mínimas históricas, precipitaciones débiles en forma de nieve y presencia de viento de componente norte.
En concreto, las habas caballares y guisante proteaginoso de zonas de Tierra Estella y Pirineos están sufriendo el rigor de estas bajas temperaturas. En cuanto a los cereales, las bajas temperaturas registradas en el pasado mes de febrero han provocado que su desarrollo fenológico se haya visto frenado.
Respecto a la ganadería, existen serias dificultades en las explotaciones a la hora de realizar las labores diarias, ya que los fuertes hielos están provocando problemas en el suministro del agua, la maquinaria se encuentra bloqueada, y continúan los problemas de transporte ocasionados por la nieve. En las praderas y forrajeras de invierno (westerwold) de la zona norte, escasa oferta de las primeras y problemas de encamado e incluso plantas afectadas como consecuencia de la nieve y fuertes heladas que están sufriendo. En zonas de la Ribera hay una mínima oferta para el ganado ovino en la zona de Bardenas, por lo que se intenta aprovechar los restos de cosechas de cultivos como maíz y bróculi, entre otros.