Un grupo de perros salvajes ha atacado y matado en las últimas semanas a 32 ovejas y cabras que pastaban en la zona del Boumort, en el término municipal de Conca de Dalt (Lleida). El primero de los ataques tuvo lugar el 10 de junio, el segundo el pasado fin de semana y el último anteayer por la noche. Además de las 32 cabezas de ganado muertas son varias las ovejas y cabras heridas por los mordiscos de los perros salvajes, o que se encuentran desaparecidas al huir tras los ataques.
El alcalde de Conca de Dalt, Martí Cardona, ha indicado que “pusimos los hechos en conocimiento del departamento de Medio Ambiente de la Generalitat para que autorizara batidas para intentar capturar a los perros que han protagonizado estos ataques, pero la autorización no llegó hasta el pasado lunes”. Por este motivo, el pleno del ayuntamiento de Conca de Dalt aprobó una moción por la que traslada “cualquier responsabilidad de los ataques al departamento de Medio Ambiente por denegar, en primera instancia, la autorización correspondiente para efectuar batidas”.
Fuentes de esa Consellería en Lleida han informado de que “en este, como en otros casos, se ha seguido el protocolo de la Ley de Protección de Animales, y se ha concedido la autorización para las batidas en base a lo que precisamente establece ese protocolo”.