La organización agraria UPA denuncia que en la provincia de Zamora se han llevado a cabo incorrectas aplicaciones de la vacuna que se administra a la ganadería ovina para evitar casos de la enfermedad de la lengua azul. Esta vacunación debe ser subcutánea, pero en vez de ello se ha aplicado “de cualquier manera, de prisa y con poco personal”, según han informado a Efe fuentes de esta organización en Zamora.
UPA ha detectado incluso algún caso en la comarca de Sanabria en el que los veterinarios que aplican la vacuna pincharon con la aguja de la jeringuilla al ganadero que sujetaba la oveja, lo que pone de manifiesto “las prisas y la presión a la que se está sometiendo a los veterinarios”.
La organización agraria culpa de estas malas prácticas a la empresa Avescal, a la que la Junta de Castilla y León ha encargado la administración de la vacuna, debido a que quiere realizar el trabajo “con poco personal y de cualquier manera”.
Además, UPA ha asegurado que la incorrecta aplicación puede suponer un riesgo muy alto de que la vacuna no funcione y de que las ovejas puedan sufrir abortos.
La organización agraria ha recomendado a los ganaderos que exijan una aplicación correcta y, en caso contrario, que reclamen los daños que pueda sufrir el ganado. Además, ha exigido a la Junta de Castilla y León que convoque reuniones periódicas para informar de la vacunación a las tres organizaciones agrarias con representación en la Cámara Agraria Provincial de Zamora.