Este año, concretamente en julio, se cumplen ocho años desde la entrada en vigor de la normativa (Real Decreto 947/2005, de 29 de julio) sobre la identificación y registro de los animales de las especies ovina y caprina. A finales de este año, en teoría, no quedará ningún animal sin identificar. Con este motivo, la revista Ovinos del Suroeste, editado por la cooperativa Oviso, realiza una entrevista a Valentín Almansa de Lara, director general de Sanidad de la Producción Agraria del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente.
Almansa describe lo que va a ocurrir este año con la identificación: “Seguiremos cumpliendo la normativa comunitaria y nacional que obliga a la identificación electrónica de los ovinos que no vayan a matadero antes de los 12 meses. Sería deseable que en este punto pudiéramos utilizar esta identificación electrónica en las bases de datos, facilitando de esta manera al ganadero la actualización del libro de registro y el manejo en la explotación”.
Por otra parte, el director general se refiere a las posibilidades de este sistema en la trazabilidad: “La identificación electrónica es una herramienta clave de la trazabilidad, sobre todo en sistemas de producción como el ovino, en los que el número de cabezas de ganado es elevado y difícil de controlar solamente con una identificación visual. El uso de la electrónica permite una conexión inmediata y segura a los sistemas informáticos. Esto aportaría una información básica a los consumidores, ya no solo desde el punto de vista de seguridad alimentaria, si no también de la posibilidad de informarse sobre determinadas marcas de calidad”.