Sebastián Martín
Veterinario Asesor Consultor de OVIverso
Tlf.- 609047583
29/04/2025La estabulación de los animales produce calor, humedad, gases nocivos (mayormente amoniaco, CO2…), partículas de polvo, carga microbiana, que en definitiva genera lo que podemos denominar un ambiente ‘viciado’ o ‘contaminado’ que es necesario renovar constantemente para mantener el confort de los animales y salubridad de la instalación. Así, solemos decir “esta nave está cargada” como síntoma que rápidamente describe que la ventilación de la nave no está siendo la correcta.
Los gases nocivos son los responsables de la constante irritación de las mucosas de las vías respiratorias altas y de la bajada de defensas locales que, junto a una carga bacteriana mayor en un ambiente mal ventilado, puede provocar problemas patológicos como neumonías, siendo una de las principales causas de muerte en lechazos, corderas de reposición y corderos de cebo. En las ovejas de ordeño la falta de una correcta ventilación impide su bienestar ambiental y en consecuencia una menor productividad láctea, como hemos podido analizar en este trabajo.
Las naves deben mantener una ventilación lateral de barrido entre las aperturas de sus ejes laterales. Es lo que denominamos ‘efecto barrido’ que permitirá arrastrar el aire viciado generado en el interior y que saldrá por las ventanas del lateral contrario. Esta ventilación tiene mucha importancia sobre todo en verano. En ese arrastre se intercambia el aire viciado por un aire limpio además de conseguir un cierto efecto brisa sobre los animales que también ayudará a mitigar en parte los efectos de las altas temperaturas en verano.
Por su parte, la ventilación vertical (‘efecto chimenea’) es más importante en invierno pues el aire viciado, al ser más caliente que el aire entrante del exterior, pesa menos y se eleva hacia la cumbrera de la nave. Por ese gradiente de temperatura sale por los dispositivos instalados al efecto, chimeneas o caballetes. Se crea así un circuito de aire entre las ventanas laterales y las aperturas de salida (chimeneas y caballetes), renovándose el aire alojado.
Ambos tipos de ventilación natural son necesarios en nuestras instalaciones siendo nuestro objetivo garantizar la entrar de aire limpio y la salida de aire viciado según las necesidades de los animales en cada momento. En muchas ocasiones, no lo conseguimos pues esta ventilación natural no va a ser suficiente para garantizar el bienestar ambiental de los animales.
Son muchos los factores que infieren en conseguir una ventilación adecuada de forma natural en las naves de ovino. Así, en una reciente publicación se cita que muchas de ellas tienen deficiencias influyendo negativamente en el bienestar ambiental de los animales alojados. Podemos hacer un análisis de situación evaluando varias circunstancias.
Geolocalización y orientación
Construcción y manejo
Si estamos ante alguna de las deficiencias citadas en el punto anterior, el sistema de ventilación por impulsión de aire puede ser una solución proporcionando una renovación de aire limpio (continua, calculada y controlada), con una distribución homogénea en toda la nave, sin generar corrientes ni zonas muertas de ventilación.
Este sistema permite captar aire limpio desde el exterior por los ventiladores (Imagen 1) de forma constante y programada, e impulsarlo y difundirlo homogéneamente en el interior de la nave a través de las mangas textiles de ventilación, que llamamos coloquialmente tubos (Imagen 2).
El sistema LUBRATEC, diseñado a medida para cada nave, permite así asegurar la renovación de aire necesaria del volumen estático de la zona de las ovejas en cada momento (hasta 15 renovaciones/hora en verano) independientemente de las condiciones estructurales de la nave (volumen estático, anchura, altura, superficie útil, aperturas laterales, paredes ciegas, etc) y las climáticas de su exterior (geolocalización, orientación eólica y solar, velocidad de las componentes mayoritarias de viento, frecuencia de lluvia, nieve, etc).
Además, la sobrepresión ejercida del aire entrante por el sistema fomenta la salida natural del aire viciado por los elementos de ventilación vertical de la instalación (caballetes o chimeneas). Este efecto también permite la reducción de la carga microbiana del ambiente limitando la incidencia de las patologías del aparato respiratorio: menor mortalidad, reducción en el uso de antibióticos y mejora en el crecimiento en el caso de la recría (Esquemas 1-4).
La ganadería Ovicanados, SC (HGA en la Asociación Nacional de Criadores de Raza Assaf - ASSAF.E) situada en Villademor de la Vega (León) está apostando por adecuar sus instalaciones para permitir maximizar todo el potencial genético de sus animales. Así, una vez optimizada la alimentación, la reproducción, el control sanitario, el manejo del ordeño y la calidad de leche, con una mejora continua de su genética, están llevando a cabo una renovación de sus instalaciones convirtiéndolos además en una referencia del sector ovino en lo que se refiere a bienestar ambiental animal.
Dentro de las dependencias, en la ganadería destacan dos naves utilizadas para las ovejas en ordeño cuyas características, desde el punto de vista de la ventilación, se describen en la Tabla 1.
Las peores características de la Nave 2 (deficiente volumen estático/oveja, con más de 20m de anchura y un lateral ciego) hizo que se decidieran inicialmente por instalar el sistema LUBRATEC de impulsión de aire en esta nave. Y para analizar su posible efecto beneficioso mejorando la ventilación en la misma, se hizo un estudio de las producciones de leche diarias individuales de las ovejas albergadas en esta nave comparando las producciones de las ovejas situadas en la Nave 1. Para poder analizar correctamente este posible efecto, eliminando el resto de los factores que condicionan la producción láctea (número de lactación de cada animal, mes de parto, propia curva de lactación a lo largo del tiempo, etc), se estudiaron solo las lactaciones de 168 ovejas de segunda lactación paridas en febrero que habían mostrado una producción de leche similar hasta el momento de iniciar la ventilación del sistema LUBRATEC (Tabla 2). Así, 58 ovejas seleccionadas estuvieron albergadas en la Nave 1 y el resto en la Nave 2 (n=110). Todas las ovejas, incluidas en este estudio o no, recibieron la misma alimentación y manejo durante la lactación.
Como hemos indicado con anterioridad, hasta el día 27 de mayo, las ovejas no manifestaron diferencias estadísticas en su producción láctea independientemente de la nave donde estuvieron alojadas (Tabla 2; p= 0,922). Este hecho es definitivo para poder analizar el efecto del factor estudiado: ventilación forzada en la Nave 2 frente a ventilación natural en la Nave 1.
El día 27 de mayo se activó el sistema de impulsión de aire LUBRATEC en la Nave 2 y se analizaron las producciones de leche en los 100 días siguientes (hasta el 12 de septiembre, 14 semanas de estudio). Así, estas ovejas manifestaron un incremento en la producción de leche estadísticamente muy significativo (p < 0,001) respecto a las ovejas de la Nave 1: +23,4l/oveja, lo que supuso un aumento del +7,3% (Tabla 2; Gráfico 1).
Estos resultados permiten destacar el efecto muy positivo del sistema LUBRATEC en la producción de leche debido a la mejora de la ventilación en la Nave 2 (Tabla 2), solventando sus graves deficiencias (Tabla 1). Esta mejora se mantuvo en el tiempo independientemente de que las temperaturas fueron subiendo en los meses de verano (Gráfico 1).
Este hecho todavía quedó más patente cuando analizamos la evolución del índice de estrés térmico (THI) a través del registro de la temperatura y humedad relativa cada 30 minutos durante el periodo estudiado en cada nave.
Como era de suponer, los peores datos los reflejaría la Nave 2, por sus peores características (Tabla 1), a pesar de haber conseguido mejorar su ventilación gracias al sistema LUBRATEC. Aún así, las diferencias de THI entre ambas naves no fueron estadísticamente significativas (p=0,119; Gráfico 2).
En ambas naves (Grafico 2), los niveles de estrés térmico subieron de 70 (estrés leve) a partir de finales de junio (semana 7) manteniéndose elevados hasta finales de agosto (semana 12), similar a lo observado en otros estudios.
Estos datos muestran una cierta independencia entre los conceptos ventilación y climatización. Su control debe ir de la mano siendo términos complementarios: podemos tener unas buenas temperaturas (termoneutralidad) en el interior de la nave y no estar ventilando correctamente, y viceversa, podemos estar ventilando bien sin mitigar el efecto negativo de las temperaturas externas del invierno y el verano.
El factor intrínseco de la ganadería que más incide en el mantenimiento de altas temperaturas interiores en las naves, y por tanto el padecimiento de estrés térmico por los animales (THI > 70), es la carga animal alojada y el volumen estático por oveja de la nave, agravado lógicamente por posibles deficiencias arquitectónicas de las instalaciones como hemos comentado en el punto 1.2.-. Es decir, cuanto mayor es la carga alojada (menor volumen estático por oveja) es más difícil mantener la nave cerca de la termoneutralidad (THI < 70). Por ello, la Nave 2 mantuvo índices de THI superiores a la Nave 1 (Gráfico 2), lo que corrobora lo dicho anteriormente: podemos controlar la ventilación y no la climatización.
Siguiendo con el punto anterior, el paso siguiente de Ovicanados SC para seguir mejorando las condiciones de sus naves ha sido el acoplamiento de la refrigeración evaporativa (cooling en inglés) al sistema LUBRATEC en la Nave 2 y la instalación completa en la Nave 1 (Imágenes 3 y 4; Esquemas 1-4). Así, además de asegurar la correcta ventilación en cada nave, podrán atender al control del THI mejorando aun más el bienestar ambiental de sus animales.
La refrigeración evaporativa (muy usada en porcino, aves y cunicultura, y cada vez más en rumiantes), hace referencia a un sistema de climatización aprovechando la energía que absorbe el agua en el proceso de su parcial evaporación al entrar en contacto directo con la corriente del aire a altas temperaturas (Esquema 1 y 2). Con este fenómeno, se consiguen dos efectos: refrescar y humidificar el aire, mejorando la sensación térmica en verano.
Es un sistema de reducida inversión, bajos costes de mantenimiento (cambio del panel de celulosa 1 vez al año) y bajo consumo eléctrico y de agua. Es ideal con un clima seco y caluroso como corresponde a la mayoría de zonas de ovino de nuestro país. Es necesario el diseño correcto del dispositivo a utilizar en cada caso siendo la superficie del cooling, su espesor y su coeficiente de saturación los factores esenciales para obtener el mejor resultado.
Todas las ventajas anteriores se ven magnificadas al acoplar este sistema a la impulsión de aire LUBRATEC dado que el aire refrescado y humificado será distribuido homogéneamente en toda la nave sin recirculación y de un modo constante. Ello contribuirá notablemente a la bajada del THI interior de la nave favoreciendo el bienestar ambiental de los animales y con ello su productividad y rentabilidad.
Una correcta ventilación es esencial para mejorar la productividad de los animales en estabulación, si además controlamos la temperatura y la humedad relativa del interior de nuestras naves (THI), las ovejas nos lo agradecerán mucho más.
Como parece inevitable que los veranos van a ser cada vez más calurosos y largos, y que en esos periodos algunos lotes de nuestros rebaños se encuentren al final de su gestación, o en lactación, o en lactación y cubrición, deberemos implementar medidas que palien el efecto negativo de estas condiciones climáticas.
Agradecimientos
Especialmente a Ovicanados SC por su constante carácter pionero e innovador y en general a todos los ganaderos que, como ellos, muestran sus ganas por mejorar día a día en la gestión del bienestar ambiental animal en sus ganaderías. También agradecer a D. Ángel Ruiz Mantecón y Dña. Mª Paz Lavín del IGM-CSIC (León) su ayuda y enseñanzas.
Bibliografía e información complementaria
Oviespaña, noticias diarias sobre el mercado nacional e internacional del ovino, investigación ganadera, alimentación y sistemas de manejo.