El nuevo año comenzará con precios más altos para la leche de cabra de los que tenía a principios de 2018

La situación en el mercado de la leche de cabra está siendo satisfactoria para los productores en esta parte final del presente año. A los incrementos en el precio que se han registrado en el último trimestre, todo indica que el ejercicio 2019 arrancará con cotizaciones más altas que las que se desarrollaron en el inicio de 2018. Por otra parte, la evolución de la producción es una de las grandes incógnitas para el desarrollo futuro del mercado, con la influencia que pueda tener la campaña de tuberculosis realizada en Andalucía. Por último, se constata que aumenta la demanda de leche de cabra, tanto en el mercado nacional como en el exterior.

PRECIOS AL ALZA

El último trimestre del presente año se va a cerrar en la leche de cabra con un precio de mercado mínimo de 7,81 euros por hectogrado, es decir, 13 pesetas por grado de extracto quesero (suma de los porcentajes de grasa y proteína). Se están produciendo operaciones con cotizaciones superiores, sobre todo con pequeñas queserías que necesitan en un momento puntual un aprovisionamiento inmediato, por lo que tampoco son extraños los precios de 8,41 euros por hectogrado (14 pesetas por grado), aunque lo cierto es que se trata de operaciones realmente específicas y aisladas, sin una influencia en lo que están dispuestos a pagar otros operadores, principalmente las grandes industrias transformadoras, que han frenado la subida en esas 13 pesetas por grado.

Para el inicio del año 2019, desde el sector productor se da por hecho que los precios del primer trimestre serán más altos que los del mismo periodo del presente año, cuando apenas se quedaron en unos 6,61 euros por hectogrado (11 pesetas por grado), llegando a bajar hasta el entorno de los 6,16 euros por hectogrado (10,25 pesetas por grado) durante los meses de primavera.

Con la seguridad de que los precios estarán por encima de esas 11 pesetas por grado de extracto, la duda está en saber el precio concreto de mercado que se fijará, que podría estar en una horquilla entre los 6,91 y 7,51 euros por hectogrado (de 11,50 a 12,50 pesetas por grado), dependiendo de la evolución de la producción en estas últimas semanas del año 2018. Otra de las dudas que se encuentra el sector es conocer el mes hasta el que se mantendrá la dinámica de precios al alza en relación con el presente ejercicio. Las voces más optimistas del sector productor indican que esta situación de precios más altos que en 2018 podría prolongarse durante todo el próximo año, mientras que los más cautelosos esperan a saber las cotizaciones que habrá en el primer trimestre para establecer definitivamente una hoja de ruta, al menos hasta el verano.

PRODUCCIÓN

La producción de leche de cabra en el año 2018 ha experimentado un fuerte vaivén según ha ido avanzando el año que ahora acaba. Mientras que durante el primer trimestre se estaban produciendo fuertes incrementos en la leche que había en el campo español, con aumentos de alrededor del 7% en la comparación entre los mismos meses de los años 2017 y 2018, la segunda parte del año se ha caracterizado por una situación totalmente inversa, a la espera de que los datos de entregas oficiales del Fondo Español de Garantía Agraria (FEGA) dibujen el panorama completo del ejercicio 2018, que probablemente será de una pequeña reducción de producción al final del año, en comparación con la campaña anterior.

La evolución de la producción será uno de los aspectos más importantes en los que puede fundamentarse la predicción sobre lo que ocurrirá en el mercado en el año 2019.

Uno de los aspectos más comentados en el sector caprino sobre la evolución de la producción se centra en la campaña voluntaria de saneamiento contra la tuberculosis, que se puso en marcha hace unos meses por la Junta de Andalucía y dirigida a las explotaciones caprinas presentes en esta comunidad autónoma. El hecho de que se subvencionara el sacrificio de animales positivos ha provocado que esta iniciativa haya tenido una acogida importante, lo que ha llevado a vaticinios de grandes descensos de la producción por la reducción del censo del caprino andaluz, principal comunidad autónoma de leche de cabra.

Sin embargo, la buena situación del mercado de la leche ha podido frenar la incorporación de ganaderos a esta campaña de saneamiento, según explica Andrés Aránega, director general de La Pastora de Taberno, cooperativa integrada en Caprina de Almería: “Por lo que ocurre en nuestra provincia, algunos ganaderos han decidido echar marcha atrás y no inscribirse en este saneamiento, debido a que la buena situación actual de precios anima a seguir produciendo. Los ganaderos más jóvenes, que saben que tienen muchos años por delante, sí que están apostando por hacer el saneamiento de tuberculosis, pero los que ya tienen una cierta edad y se acercan a la jubilación, posiblemente prefieren aguantar con el censo actual y seguir produciendo”.

CRECE LA DEMANDA

Además de la evolución en la producción de leche de cabra, el otro gran aspecto que debe analizarse para poder avanzar el camino que seguirá el sector del caprino en 2019 es la demanda por parte de los compradores, es decir, de las industrias transformadoras. En este sentido, hay tres aspectos que están teniendo influencia, todos ellos relacionados con el contexto internacional.

Por un lado, está la transformación de leche en polvo que se está realizando en España ante la creciente demanda de los países asiáticos, principalmente China. La cooperativa Uniproca y la industria Cobreros son los principales actores del envío de leche en polvo al exterior, lo que supone ‘sacar’ leche del mercado español. Si los volúmenes actuales de venta se incrementan, será un aspecto que tendrá una importancia fundamental.

Otro factor de cierta relevancia en el mercado español es una cierta revitalización en el interés y en la compra de leche española por parte de las industrias francesas elaboradoras de queso de cabra. Lo cierto es que no se está produciendo con la importancia de hace unos años, cuando esta venta de leche a Francia fue decisiva para que los precios de la leche de cabra en España se dispararan a niveles nunca vistos, pero se están produciendo algunas operaciones de forma aislada, fundamentalmente de industrias galas que no son capaces de aprovisionarse en el sector de Países Bajos, tradicional suministrador de leche de cabra a Francia.

Por último, la situación de la demanda interior también está en aumento, debido a que los quesos puros de cabra cada vez tienen una mayor aceptación en el mercado. Además, las industrias queseras españolas también están aumentando sus ventas de queso a otros países, lo que hace que tengan cierta necesidad por abastecerse de leche.