La organización agraria Asaja Almería ha lamentado hoy la "difícil situación" de algunos sectores ganaderos, como el ovino-caprino, augurando "grandes pérdidas" para estos productores debido a la paralización del consumo a causa del cierre de la hostelería para prevenir la propagación del COVID-19.
Según traslada la entidad en una nota, estos ganaderos han visto descender sus ventas en un 95 %, las lonjas se encuentran "paralizadas", se ha reducido el número de operaciones y la "preocupación por la incertidumbre" se hace patente especialmente para carnes como la de cabrito y cordero tras una semana en la que el número de sacrificios se ha reducido un 75% respecto a la misma semana del año anterior.
En este sentido, han apuntado que se trata de carnes que se consumen en menor medida en hogares y que dependen casi en exclusiva de su consumo en los establecimientos de restauración, lo que ha provocado que tras el cierre, hayan "caído en picado" los pedidos y la actividad en mataderos y canales de comercialización.
Asaja apunta a que la demanda de productos como el pollo, el cerdo e incluso la ternera aunque en menor medida sigue aguantando, ya que su consumo en los hogares está bien implantado, pero en el caso del cabrito o el cordero "no suelen formar parte del menú salvo en campañas puntuales como Navidad".
"En el caso del cordero el consumo de los españoles no llega a 1,5 kilos al año, y que sus ventas se destinan de forma mayoritaria a la hostelería de ahí que se haga necesario que desde las diferentes Administraciones, central y regional, y el resto de miembros del sector, se aúnen fuerzas para promover su consumo y evitar el hundimiento de un sector clave para muchos territorios", han concluido.
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