Finalizada la campaña de recogida de lana de oveja en las explotaciones españolas, coincidiendo con el final del verano, el comercio internacional de lana no se detiene por parte de los operadores. De hecho, en el mercado se está constatando que continúa alta la demanda internacional de lana de oveja de alta calidad, en el que la raza Merina tiene un papel preponderante. Esa demanda llega fundamentalmente, como ya ocurría en años anteriores, de la pujante industria textil china. Por lo tanto, se ha incrementado la brecha entre los precios de la lana de diferentes calidades.
Por lo tanto, la calidad de la lana es un factor decisivo para el precio que alcanza en el mercado, según señala Marco Antonio Calderón, gerente de la cooperativa Comercial Ovinos. “Para conseguir un buen precio por la lana, los productores deben cuidar el producto y que sea una lana de alta calidad, sin paja ni otros elementos vegetales”, señala.
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